El turismo está tomando cada vez más fuerza en el escenario nacional por el incremento de la llegada de foráneos, una buena noticia para la economía del país. 
En los primeros cuatro meses del año, el arribo de visitantes extranjeros al territorio nacional creció un 43%, con más de 1,9 millones de personas. 
Eso se traduce en que mientras que Colombia atraviesa por una etapa de incertidumbre, a raíz de un primer trimestre flojo, el turismo está creciendo de forma exponencial. 
Una muestra de ello son las cifras del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo y la Organización Mundial de Turismo (OMT) –a las que tuvo acceso Portafolio–. Estas muestran que Colombia tuvo un crecimiento de 12,2% en el aterrizaje de internacionales entre el 2010 y el 2016, mientras que el promedio de Latinoamérica fue de apenas 3,8% y la media mundial de 3,9%. 
“Esta industria en particular refleja la confianza renovada de la comunidad internacional en un determinado destino, y el cambio de percepción. Por eso, desde el 2005 la llegada de turistas crece a una tasa promedio tres veces superior a la del mundo”, le dijo a este diario Felipe Jaramillo, presidente de ProColombia. 
En ese sentido, Venezuela, Estados Unidos y Argentina siguen siendo las principales nacionalidades de origen, con una participación de 16,9%, 16,6% y 7%, respectivamente. 
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En cuanto al tipo de viajero, las estadísticas muestran que los no residentes llevan la delantera, con un 47,7% de participación, que a su vez representa una variación de 18,3%. Les siguen los transfronterizos, con 32,4% y un alza de 180,2%, y, en tercer lugar, colombianos residentes en el exterior, con 10,4%, lo cual denota un incremento de 5,9%.
Eso sin contar que el año pasado ingresaron US$5.688 millones de divisas, convirtiendo a esa industria en el segundo generador de recursos, después del petróleo. 
“Sin duda alguna, el aterrizaje de más foráneos al país es resultado de lo que hemos venido haciendo el Gobierno y los gremios de manera mancomunada. Además de la promoción del país que realizamos en el exterior”, comentó al respecto Paula Cortés, presidenta de la Asociación de Agencias de Viajes y Turismo (Anato). 
Como motor de empleo, este segmento también está ganando protagonismo, pues el sector de comercio, hoteles y restaurantes, entre enero y abril, se ubicó en 27,2%, seguido por servicios comunales, sociales y personales (19,2%); agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca (16,4%) e industria manufacturera (12,4%).
La ocupación hotelera marcó récord el año pasado, y en lo corrido del 2017 muestra unas cifras alentadoras, a pesar de la desaceleración en toda la economía. De hecho, en Semana Santa fue bastante positiva, pues cerró con un 63,7% en los 11 principales destinos turísticos del país: Risaralda, Quindío, Caldas, Antioquia, Bolívar, Boyacá, Magdalena, Meta, San Andrés, Santander y Valle del Cauca.
En cuanto a los hoteles, a estos establecimientos entraron más de 1 millón de extranjeros, según cálculos de la Asociación Hotelera Colombiana (Cotelco). 
El aumento de rutas y de la cantidad de asientos por avión es otro factor que fomenta el turismo receptivo. 
“Para el primer bimestre del 2017, si bien las frecuencias internacionales se han contraído en 1% con respecto del mismo periodo del año anterior, el número de sillas disponibles en vuelos de este tipo ha crecido 2% en el mismo lapso y la cantidad de pasajeros se ha incrementado 4%, con una ocupación promedio de 83%”, manifestó Gilberto Salcedo, presidente de la Asociación de Transporte Aéreo de Colombia (Atac). 
El directivo también destacó la apertura de nuevas rutas internacionales, que auguran un segundo semestre más positivo, tales como Armenia-Panamá, Bogotá-Isla Margarita, Bogotá-Cuzco, Cali-Panamá, Cartagena-Lima y, la más reciente, Cartagena-Canadá.

Fuente: Portafolio