La aplicación de la inteligencia artificial (IA) en diferentes sectores productivos de la sociedad, puede constituir grandes desafíos y oportunidades para los países en vías de desarrollo. Si bien tal revolución digital implica la pérdida masiva de trabajos en fábricas industriales y en líneas de ensamble a raíz de la robotización y la sistematización de IA, también se crean oportunidades de competitividad a nivel internacional. En este sentido, el economista Jeffrey Sachs de la Universidad de Harvard, explora algunas de estas posibilidades en su artículo “Algunas breves reflexiones sobre tecnologías digitales y desarrollo económico”, publicado en la revista Ética y Asuntos Internacionales de la Universidad de Cambridge.  

Sachs argumenta que los países en vía de desarrollo pueden crear nuevos sectores de exportación basados en la digitalización de la agricultura, energías renovables, turismo, servicios de información, atención médica y educación. La infraestructura tecnológica que permitirá acceder a estos mercados deberá financiarse a través del capital privado internacional (por ejemplo, mediante inversiones en telecomunicaciones, 5G, hardware y software digital) que buscan expandir los mercados en países de bajos ingresos.

Para desarrollar estas capacidades será necesario garantizar una educación secundaria, profesional y superior de alta calidad, donde la educación virtual debe jugar un papel primordial. Para lograr esto, se deberá formar una gran cantidad de talento TIC, que profundice el desarrollo e implementación de nuevas tecnologías digitales en nuevos segmentos de mercado. Por tal motivo, la implementación digital introduce el concepto de “mercados del futuro”, en el que los sectores clave de la economía deberán aplicar esfuerzos para poder acceder al aumento productivo a nivel global. Para  Sachs, los efectos del aumento de tecnologías digitales serán los siguientes en cada uno de los sectores estratégicos:

• Agricultura: un rápido aumento en la mecanización, un aumento en la producción de la agricultura de precisión y una disminución en la demanda de mano de obra agrícola poco calificada.
• Fabricación: un rápido aumento en la mecanización y los sistemas de inteligencia artificial, un aumento en la producción y una disminución en la demanda de mano de obra poco calificada y un aumento en la demanda de mano de obra altamente calificada.
• Servicios empresariales: una fuerte disminución de la demanda de mano de obra poco calificada, y un aumento de la producción y productividad intensivas en capital basadas en robótica y vehículos autónomos.
• Atención médica: una importante expansión del acceso a atención médica de bajo costo y alta calidad, que incluye telemedicina, monitoreo remoto de pacientes, diagnóstico remoto y sistemas de salud automatizados expertos que reemplazan a los médicos.
• Educación: una gran expansión del acceso a educación en línea de bajo costo y alta calidad, que incluye currículos en línea, monitoreo en línea del progreso de los estudiantes, capacitación docente en línea, "aulas conectadas" a través de videoconferencia y tutoría a distancia.
• Finanzas: sistemas de pagos electrónicos de bajo costo  y servicios de banca electrónica para transferencias de dinero y préstamos.
• Transporte: transporte en línea, servicios de uso compartido de automóviles y transporte público automatizado (como rutas de autobuses automáticas)
• Gobernanza: avances importantes en la gobernanza electrónica, incluida la identificación biométrica única, los pagos en línea de impuestos y transferencias, la vigilancia electrónica y el monitoreo remoto de áreas públicas, el voto electrónico, las licencias en línea y otros servicios públicos.

Es de esta forma que los países en vías de desarrollo, y regiones competitivas deben ahondar esfuerzos para construir fuertes estrategias de desarrollo basados en la transformación digital de sus sectores más productivos. La aplicación de inteligencia artificial en el sector financiero y gobierno son fundamentales para una economía estable y consolidada. La implementación de robótica en los sectores industriales y de transporte, pueden aumentar sustancialmente la calidad de vida de las sociedades. Y el tránsito hacia una gama de servicios electrónicos en términos de gobernanza, salud y educación, son fundamentales para el aumento de cobertura de servicios básicos de forma universal.

En conclusión, la automatización y revolución tecnológica puede profundizar la brecha entre países desarrollados y no desarrollados, o puede tener la capacidad de superar los efectos negativos de una economía centralizada en trabajos poco calificados, por medio de la transferencia de habilidades y tecnologías digitales, construyendo industrias de bases tecnológicas con una mano obra altamente capacitada para acceder a los “mercados del futuro”.

 
Bibliografía: 

Sachs, J. (2019). Some Brief Reflections on Digital Technologies and Economic Development. Ethics & International Affairs, 33(2), 159-167. doi:10.1017/S0892679419000133

Tomado de:  Cambridge University Press