Expertos han coincidido que en el sector financiero, la transformación digital no es tener canales electrónicos, sino que se trata de un proceso mucho más profundo que implica también cambios en la forma de ser de las entidades y sus colaboradores.

Aunque son las grandes compañías las que han tomado la delantera, por la gran cantidad de tiempo y recursos que demanda la estrategia, las de menor tamaño también quieren entrar en esta transformación pero no siempre saben cómo lograrlo.
Ante esta situación, la Corporación Financiera Internacional (más conocida como IFC, por su sigla en inglés), que hace parte del Grupo Banco Mundial, está desarrollando el DigiLab Finance.

Se trata de un programa de capacitación de 11 semanas que, en alianza con Accenture, ayuda a las entidades financieras a desarrollar estrategias digitales alrededor de las nuevas demandas de sus clientes, aprovechando la tecnología que existe.

Con esto, no solo se logran más y mejores servicios de las instituciones financieras, así como un incremento en la eficiencia y en los resultados corporativos, sino que tiene repercusiones en la inclusión financiera.

“Los bancos medianos y pequeños también están viendo cómo se transforman, pero la pregunta es cómo, porque la transformación no es un fin, sino que la tecnología les ayuda con una mejor oferta de valor al cliente, a reducir costos, entre muchas otras cosas”, explicó Liliana Pozzo, responsable del programa de IFC de asesoría para el sector financiero.

De hecho, una encuesta de Accenture señala que más de la mitad de las empresas todavía no tienen una estrategia digital, e incluso hay quienes sí la tienen, pero no están seguros de que sea la adecuada.
Pero además, seis de cada 10 compañías sienten que aún ni perciben rendimientos ni beneficios tangibles de su transformación.

La experta añade que no se trata simplemente de un tema teórico, pues el objetivo es que las entidades participantes salgan con una estrategia lista para ser adoptada.

En ese sentido, Pozzo señala que el enfoque es amplio, pues incluye no solamente el conocimiento sobre las tecnologías, desmitificarlas y ver cómo se aplican en cada caso particular, sino estrategias de negocio, cambios en el modelo operativo y ver qué es lo que está cambiando en los clientes.

Además de la capacitación presencial y online, parte del plan es conocer de primera mano lo que han hecho grandes entidades del sector en sus labores de transformación y en lo que ya han tenido resultados.

Esta semana inicia en Bogotá el segundo programa que realiza DigiLab, en el cual participan entidades financieras de varios países latinoamericanos, pues la idea es que sea un proyecto regional, para instituciones de países en donde más se ha desarrollado la industria ‘fintech’. Después de esta edición, la idea de IFC y Accenture es realizar otros dos ciclos durante el 2019.

Tomado de: www.portafolio.co